En México, miles de empresas de servicios desde clínicas, despachos y gimnasios, hasta talleres y consultorios– pierden clientes todos los días por una razón silenciosa pero devastadora: agendar una cita es complicado, lento y nada interactivo.
Tus clientes viven en WhatsApp, Messenger e Instagram, pero tú les pides que llenen un formulario web que se tarda, consume datos móviles o les exige demasiada información.
¿El resultado? Abandono, pérdida de demanda y una mala